El jardín de la conciencia

El jardín de la conciencia
me lleva a preguntar: 
¿dónde quedó el listón 
que me lleva al cielo? 

¡Qué es el cielo sino el amor!

Paso tras noche, encuentro
que soy la lluvia al trasnochar
la esperanza más lejos de mí,
más cerca del que añora paz. 

Caminamos en círculos,
a veces de ellos, a veces mío,
pero la esperanza es dueña 
de nadie porque camina 
en los dominios del amor. 

¡Qué es el amor sino el cielo!

Llueve. Se riega el jardín 
de la conciencia
y todo vuelve a comenzar.