Palabras como polvos mágicos
Lina Ru
Palabras como polvos mágicos
Las palabras se disuelven como polvos mágicos en un desierto donde cada grano de arena es un pensamiento que intenta alcanzar a los demás, el viento las eleva, el viento las lleva hasta que es tiempo de callar. En sí las palabras no tienen fuerza, pero el viento que las lleva y las transforma nos toca, nos cambia y de ellas nace lo que somos: fragmentos de ideas entrelazándose con la fuerza de la conciencia. Sin ellas no entenderíamos al otro, con ellas peleamos la sombra que nos asecha y desecha hasta quedar mudos. En el silencio es donde se concreta el amor que nos convoca a hablar con las miradas que comunican un pasado que se fue y nunca volverá. Pero vuelven los recuerdos como lluvia a un desierto que da todo lo que es hasta que vuelve el viento y nos deja para que hagamos de los polvos mágicos un nuevo comenzar que intenta alcanzar a los demás.
La palabra puede ser nuestra salvación, así como nuestra perdición. Las palabras son escurridizas, pero también son más permanentes que la vida de un hombre. ¿Qué hacer ante tal dilema? Escuchar en el seno del silencio y pedirle a la vida que el lenguaje nos lleve a sanar en vez de pelear.